Comida en Malasia: 10 Platos típicos

Malasia es un destino que ofrece mucho más que playas paradisíacas, selvas exuberantes y ciudades vibrantes. También es un paraíso para los amantes de la buena comida, ya que su gastronomía refleja la rica mezcla de culturas que conviven en el país: malaya, china, india, portuguesa y otras más. En este post, te vamos a mostrar 10 platos típicos que comer en Malasia para probar en tu viaje, desde el famoso Nasi Lemak hasta los deliciosos Hokkien Mee. ¡Prepárate para salivar!

El Nasi Lemak es el plato nacional y, por lo tanto, un obligado que debes comer en Malasia. Además es el desayuno más popular entre los locales. Consiste en arroz cocido en leche de coco y hojas de pandan, que le dan un aroma y un sabor muy característicos. Se sirve con anchoas fritas, cacahuetes, huevo duro, pepino, sambal (una salsa picante de chile y gambas) y, a veces, pollo o pescado frito. Es un plato muy completo y sabroso, que se puede encontrar en cualquier puesto callejero o restaurante del país.

El Satay es otro de los platos más famosos y extendidos que comer en Malasia. Se trata de brochetas de carne (normalmente de pollo, ternera o cordero) marinadas en especias y asadas a la parrilla. Se acompañan de una salsa de cacahuete espesa y dulce, que contrasta con el sabor ahumado de la carne. También se suelen servir con pepino, cebolla y ketupat (un tipo de arroz glutinoso envuelto en hojas de palma). El satay es un plato ideal para compartir y disfrutar en cualquier momento del día.

La Laksa es una sopa de fideos muy típica de Malasia, especialmente de la isla de Penang. Hay dos variedades principales: la Laksa Asam, que tiene un caldo ácido y picante de pescado y tamarindo, y la Laksa Lemak, que tiene un caldo cremoso y dulce de leche de coco y curry. Ambas se elaboran con fideos de arroz, pollo, gambas, tofu, brotes de soja, hierbas y lima. La Laksa es un plato reconfortante y lleno de sabor, que se puede encontrar en los mercados nocturnos y en los restaurantes especializados.

El Char Kway Teow es uno de los platos de fideos más populares de Malasia, originario de la región de Penang. Consiste en fideos de arroz planos salteados al wok con salsa de soja, ajo, chile, gambas, mejillones, brotes de soja, huevo y cebollino. A veces, también se le añade salchicha china, pastel de pescado o manteca de cerdo. El Char Kway Teow es un plato sencillo pero delicioso, que se puede degustar en los puestos callejeros o en los restaurantes de comida china.

El Roti Canai es un pan plano de origen indio, que se prepara con harina, agua, aceite y sal. Se amasa, se estira y se dobla varias veces, hasta formar una capa fina y elástica. Luego, se cocina en una plancha caliente, hasta que queda crujiente por fuera y tierno por dentro. El Roti Canai se suele comer con las manos, mojándolo en diferentes salsas, como el curry, el dahl (lentejas) o el sambal. También se puede rellenar de queso, chocolate, plátano o huevo. Es un plato muy versátil y económico, que se puede encontrar en los restaurantes de comida india o en los mamak (cafeterías musulmanas).

El Nasi Goreng es el plato de arroz frito por excelencia de Malasia, aunque también es muy común en Indonesia y otros países del sudeste asiático. Se elabora con arroz cocido, salsa de soja, ajo, cebolla, chile, huevo, pollo, gambas y verduras. Se suele adornar con pepino, tomate, cilantro y krupuk (unas galletas fritas de arroz o tapioca). El nasi goreng es un plato muy nutritivo y fácil de preparar, que se puede comer solo o acompañado de otros platos.

El Hokkien Mee es otro plato de fideos muy popular que debes comer en Malasia, especialmente en Kuala Lumpur. Se trata de fideos de huevo gruesos fritos en salsa de soja oscura, con carne de cerdo, sepia, repollo y cortezas de cerdo. Se sirve con una salsa picante de chile y lima, que le da un toque fresco y ácido. El Hokkien Mee es un plato muy sabroso y contundente, que se puede disfrutar en los restaurantes de comida china o en los puestos callejeros.

El Rojak es una ensalada muy peculiar que comer en Malasia, que mezcla ingredientes dulces y salados. Se compone de frutas (como piña, mango, manzana o pomelo), verduras (como pepino, nabo o espinacas), tofu frito, yuca frita, churros y huevos duros. Todo se aliña con una salsa de tamarindo, azúcar, limón, cacahuetes y gambas secas, que le da un sabor agridulce y picante. El Rojak es un plato muy refrescante y nutritivo, que se puede encontrar en los mercados y en los puestos callejeros.

El Cendol es un postre muy típico de Malasia, que se suele tomar para combatir el calor. Consiste en unos fideos verdes de harina de arroz con sabor a pandan, que se sirven en un bol con hielo picado, leche de coco, azúcar de palma y judías rojas. El Cendol es un postre muy dulce y cremoso, que se puede encontrar en los puestos callejeros o en los restaurantes de postres.

El Teh Tarik es la bebida más popular de Malasia, que se puede tomar en cualquier momento del día. Se trata de un té negro con leche condensada, que se prepara de una forma muy curiosa: se vierte el té de una taza a otra, estirando los brazos y creando una espuma. El Teh Tarik es una bebida muy dulce y aromática, que se puede disfrutar en los restaurantes de comida india, en los mamak o en los puestos callejeros.

Estos son solo algunos de los platos típicos de Malasia que puedes probar en tu viaje, pero hay muchos más. La gastronomía malaya es una de las más variadas y ricas del mundo, con muchas influencias de otros países asiáticos, que te sorprenderá por su sabor, su color y su aroma. ¿Te animas a descubrirla?